Ahora que tan de moda está el tema del #cautiverio, aprovecho para recuperar estas fotos de mi bajada a las mazmorras subterráneas (a 6 metros de profundidad) en El M’tamar (‘las mazmorras’), en la medina de #Tetuán (#Marruecos), con acceso único desde el patio de la casa Ben Marzouk. Cervantes, por cierto, menciona las mazmorras de Tetuán en su entremés «El juez de los divorcios». En las mazmorras había capillas con hornacinas donde los cautivos cristianos ponían alguna imagen o estampa piadosa para sus oraciones. Esto fue en el año 2015, en el Coloquio Internacional «Marruecos y Tetuán en la obra de Cervantes», magníficamente organizado por el colega Abderrahman El Fathi de la Universidad Abdelmalek Essaâdi, con la colaboración del Instituto Cervantes de Tetuán y GRISO-Universidad de Navarra.