Si crees que “otra vez ya están los políticos enzarzándose entre ellos en lugar de solucionar lo del fuego”, es que eres una víctima de la desinformación.
Cuando comenten graves errores, a la clase política gobernante le interesa más fomentar tu descreimiento para que te desencantes y te desenganches del periodismo riguroso que te está detallando exactamente donde, como, quien y por qué la han cagado.