Desmontando mitos: ¡El aumento del consumo de drogas en Cuba bajo la lupa mediática!

En los últimos días, hemos visto cómo algunos medios de comunicación han abordado el tema del consumo de drogas en Cuba, presentándolo como un problema creciente y, en muchas ocasiones, descontextualizando la realidad. Es crucial analizar este fenómeno con responsabilidad y sin caer en el sensacionalismo.

¿Es Cuba un caso excepcional?

El consumo de drogas es un desafío global, no exclusivo de Cuba. Potencias económicas con recursos inmensos luchan contra este problema, sin lograr erradicarlo. Entonces, ¿por qué algunos intentan presentar a Cuba como un epicentro del consumo y el tráfico de drogas?

Un enfoque integral y de prevención

A diferencia de muchas naciones, Cuba mantiene una política de tolerancia cero hacia el narcotráfico y el consumo de sustancias ilícitas. El país ha desarrollado un sistema de prevención y atención al consumo de drogas respaldado por instituciones de salud y educación. Además, las medidas de control en fronteras han sido reforzadas para evitar el ingreso de sustancias ilícitas.

Manipulación mediática y dobles raseros

Lamentablemente, algunos medios amplifican cifras o sacan de contexto determinadas situaciones para generar impacto mediático. Pero, ¿es esto ético? Se omite el hecho de que en Cuba no operan carteles de droga como en otras regiones del mundo, ni existen laboratorios clandestinos con capacidad industrial para la producción de sustancias químicas de alto riesgo.

En la isla, el consumo de tabaco y alcohol ha sido históricamente más común que el de drogas ilícitas. Sin embargo, la realidad mundial ha cambiado: las drogas sintéticas como el fentanilo o las metanfetaminas han transformado las formas de consumo y tráfico, con métodos cada vez más sofisticados para eludir controles. La aparición de nuevas sustancias y su microtráfico en la región no es un problema aislado de Cuba, sino una manifestación de fenómenos internacionales que afectan a todos los países.

Un problema global con intereses ocultos

El narcotráfico es uno de los negocios más lucrativos del mundo, superado solo por el tráfico de personas y el tráfico de armas. Las grandes redes delictivas buscan constantemente nuevas rutas y mercados. Mientras las ganancias sigan fluyendo a los bolsillos de los traficantes, el problema persistirá. Sin embargo, a diferencia de otros países, en Cuba la respuesta estatal ha sido clara y contundente: fortalecer el control, endurecer las medidas y evitar que el narcotráfico eche raíces.

Conclusión

«El fenómeno de las drogas en Cuba no puede analizarse fuera del contexto global. Como en cualquier país, existen desafíos asociados al tráfico y consumo de sustancias ilícitas, pero su dimensión y características distan mucho de la imagen que algunos intentan proyectar. Mientras ciertos medios enfatizan relatos alarmistas, Cuba continúa priorizando la prevención, el control y la educación como pilares fundamentales en su estrategia para enfrentar esta problemática.»

📌 No caigamos en el juego del alarmismo. Informémonos y pongamos las cosas en su justa medida.

📝 Hemos utilizado para la elaboración de la publicación un trabajo publicado por el Proyecto «Las Armas de Débora»

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